Wilber Calver Rodríguez, más conocido como el gaitero de ébano, nació en Holguín (Cuba) hace 37 años. En 1997 se alistó como percusionista en el grupo de música tradicional del Centro Gallego de La Habana, con quien actuó en numerosos festivales.
En 1998, el profesor Eduardo Lorenzo le impartió unas inolvidables lecciones de gaita que derivaron en su curiosidad y embrujo ante las tuberías tomando la decisión de dedicarse a este instrumento, Su trabajo, entrega, esfuerzo y rendimiento se refleja en el documental de la Unión Europea «Los últimos gaiteros de La Habana», en la obtención del «Premio Iberoamericano» Rey de España «(2004) o en la participación en la película» Havana Blues «(2005 ) dirigida por Benito Zambrano.
Actualmente, el gaitero de ébano vive en Einsiedeln, un paisajístico pueblo de los Alpes Suizos donde ha elaborado el proceso de grabación de este primer álbum en su carrera musical, Diáspora. Un álbum compuestos por una excitante fusión de melodías celtas con raìces afrocubanas arreglado y producido por Alex Wilson que augura ser un gran éxito.
Entrevista:
1 – ¿Quién es en realidad Will Calver? ¿Y el gaitero de ébano?
Wilber Calver y el gaitero de ébano son una misma persona, no se puede separar uno del otro. La única diferencia es que cuando Wilber toca la gaita o cualquier instrumento, en ese momento está viviendo y expresando su mundo interior…
2 – ¿Cómo se definiría Will Calver, el gaitero de ébano en el campo musical… como gaitero, flautista o simplemente como amante de la música?
Independientemente que toco la gaita y hago un poco de música no me considero gaitero ni músico, me considero un amante de la música por las siguientes razones:
* Un gaitero desde mi punto de vista, es aquel que posee la técnica y el control que le permiten explotar al máximo el instrumento para obtener un fantástico resultado musical, embelleciendo de esta manera las melodías ejecutadas con la gaita
* Un verdadero músico en quién tiene los conocimientos necesarios para tomar del aire el sonido de las notas y plasmarlo en un pentágrama utilizando el idioma de la música, armonía, afinación, escalas entre otros elementos.
* Soy amante de la música porque pongo el corazón, cuerpo y alma en las cosas que hago, los ritmos y melodías primeramente suenan dentro de mi cuerpo, luego van a la cabeza y desde allí se transmiten a mis manos. Mi técnica con la gaita es bastante sencilla y mis conocimientos musicales muy escasos ya que nunca he estudiado en una escuela de música o de gaitas. Se puede ser campeón de gaitas del mundo, tener la mejor técnica, tocar un tema de memoria con virtuosismo y sin embargo, la música puede carecer de alma puesto que no le han puesto corazón. De esta misma manera puedes suceder con en músico graduado del mejor conservatorio pero… El amante de la música, su única técnica y escuela es su corazón, cuerpo y alma …
3 – ¿Te consideras un trotamundos?
Si tomamos como punto de referencia que me gusta viajar, conocer otras culturas e interactuar con personas de todas partes del mundo sin importarme su status social y filosofía de vida, entonces soy un trota mundo. Estoy totalmente de acuerdo y pongo en práctica la teoría que plantea que… «El movimiento es la base del desarrollo»
4 – ¿Cómo conociste y entraste en contacto con la gaita?
La primera vez que vi la gaita recuerdo que fue en unas viejas películas cuando era niño y su nombre lo aprendí más tarde leyendo una revista infantil que llegaba a Cuba desde la antigua URSS. A finales de 1995 conocí en la habana a la primera persona que tocaba gaita y a partir de ese momento comenzó mi vínculo con las sociedades gallegas y la música tradicional.
5 – ¿Qué significa para un cubano como tù tocar un instrumento de estas características?
La gaita para mi es más que un instrumento, recuerdo que cuando vivía en Cuba, me gustaba tocar junto al mar con sus olas enfurecidas los días grises de invierno. En esos momentos era como poder volar sobre aquel mar enfurecido y conectarme con mi yo interno, entre el sonido pedal del roncón y el fuerte batir de las olas, era como estar sumergido en una meditación y podía pasar horas tocando en el mismo lugar. Con la gaita aprendí y logré evadirme de todos mis problemas y preocupaciones y temores.
Por otra parte fue bastante difícil integrar la gaita y presentarla al público cubano de una manera más cercana a nuestra cultura. Recuerdo la risa que causaba a las personas cuando tocaba por las calles, me veían como un loco y hasta llegaron a llamarme » El gaitero de la habana». En aquellos momentos era un verdadero «Nadar contra la corriente», nadie creía en mí hasta que comenzaron a escuchar mis primeros trabajos de gaita y ritmos Afrocubanos.
6 – ¿Cuál es la fuente de inspiración a la hora de componer?
A la hora de componer o hacer un arreglo cualquier cosa puede inspirarme, desde ver a dos personas bailando hasta escuchar una simple sonrisa, mis amigos siempre dicen que tengo mucha imanación y en verdad me gusta dejar en libertad mi espíritu infantil que llevo dentro, disfruto mucho manteniendo viva esta parte infantil que me ayuda a reflexionar o a combinar sonidos en espacios de tiempo.
7 – ¿Según tu experiencia qué características hace falta para ser un buen gaitero?
A mi modo de ver las cosas creo que para ser un buen gaitero como para lograr una meta o alcanzar un sueño en la vida, es importante saber respetar y tener humildad tratando a todos por igual, no importa si tiene mayor o menor conocimientos o experiencias. Otro punto a tener en cuenta es ser constante, como lo dijo Beethoven … «El genio se compone del dos por ciento de talento y del noventa y ocho por ciento de perseverante aplicación».
8 – ¿Persigues un sueño? ¿Cuál?
El sueño que persigo es aprender música para poder expresar de mejor manera todas las ideas que llevo dentro.
9 – Acabas de grabar tu primer disco, Diáspora. ¿Me podrías contar cómo se ha desarrollado este proyecto y qué supone en tu carrera?
Diáspora ha tenido un largo proceso ya que no es un nuevo proyecto cómo muchos piensan, es un proyecto comenzó hace más de 13 años pero que no fue posible realizarlo hasta ahora por diversas causa.
En 1995, cuando conocí al primer gaitero en La Habana, mi primera pregunta fue «¿Cómo sonará la gaita con el bongo y los tambores batá?» A partir de ese momento siempre tenía la inquietud por escuchar los dos instrumentos tocando juntos. Para todos era un loco y para otros sencillamente lo que pensaba y decía carecía de toda importancia porque yo no estudié música, recuerdo que mi primera fusión fue la «Danza de San Roque » con el ritmo de guaguancó, de esta manera quería demostrar que era posible hacer esta fusión y juntar algunos músicos.
La segunda y fundamental causa que frenó el desarrollo de este proyecto fue que en Cuba, si no eres un músico graduado en una escuela de música no se te aceptaba en ninguna de las empresas artísticas que agrupa a las diversa bandas y artistas solistas y… Si no pertenecías a alguna de dichas empresas no podía presentarme en escenarios oficiales como cabaret, discotecas, hoteles y teatros. Recuerdo que en dos ocasiones me ofrecieron contratos para tocar cinco meses en Turquía y dos en Bahamas, pero por las razones antes explicadas no fue posible, es algo mucho más complicado de lo que se imaginan muchos…
Afortunadamente en el año 2009, después de pasar por España sin obtener éxito al intentar hacer una banda y grabar un CD llegué a Suiza, donde nuevamente comencé a buscar músicos y esta vez, he encontrado músicos y amigos entre ellos al pianista, arreglista, compositor y productor inglés Alex Wilson, que comenzamos a trabajar juntos en la producción de Diáspora en mayo del 2010.
Trabajé fuertemente en la construcción para conseguir dinero para las grabaciones y luego logré el apoyo de «SüdKulturFonds» asociación cultural suiza que ayuda al desarrollo de proyectos culturales y el apoyo y la ayuda de SchyzKultur. Gracias a todos estos años y esfuerzos logré desarrollarme más y Diáspora es una realidad.
10 – ¿A qué tipo de público te gustaría llegar?
No tengo un público específico, hago música para todas las personas que quieran escucharla y deseen disfrutarla, no tengo distinción de edades, sexo, razas ni nacionalidades…
11 – Actualmente estás residiendo en Suiza, ¿ha sido difícil abrirse camino en el mundo musical del país helvético?
En Suiza ha sido y es difícil abrirse camino en el mundo musical, para comenzar ya tengo la primera y gran barrera que es aprender el idioma alemán, esto es fundamental para la comunicación y hacer nuevos contactos. Por otra parte es comenzar desde cero, conocer y juntar los músicos adecuado para lograr hacer realidad el proyecto deseado y con la calidad requerida.
Ahora el reto ha sido doble, he tenido que presentar y convencer no solo al gran público latino que existe en Suiza, sino también a los propios suizos que no tienen la gaita incluida en sus raíces culturales.
12 – ¿Qué me podrías contar sobre tus futuros proyectos musicales, giras, conciertos…?
En estos momentos me encuentro trabajando en la coordinación y programación de conciertos y festivales del próximo año, de momento ya tengo algunas fechas previstas, dentro y fuera de Suiza, algunas ya están confirmadas.
13 – ¿Tienes algún referente musical en tu vida? ¿Te gustaría recibir o realizar alguna colaboración especial de algún artista del momento?
Al principio buscaba y tenía como punto de referencia a gaiteros y bandas de Galicia y Asturias fundamentalmente, escuchaba a gaiteros cómo Carlos Núñez y algunas bandas, Milladoiro, Llan de Cubel entre otras. En aquel tiempo no era muy fácil de adquirir este tipo música.
El gaitero que realmente me inspiró y me cambió el horizonte de la gaita con su música, desgraciadamente ya no existe, en el año 2005 murió pero aún escucho su música, se llamaba Martyn Bennet. Hay un tema que si mal no recuerdo ahora se llama «Spree» de su álbum Hardland. Siempre que estoy bajo de humor lo escucho para animarme y continuar adelante.
Al llegar a Europa en el año 2006, unas de las primeras cosas que hice fue comenzar a buscar información sobre él, su historia me conmovió mucho, ver lo joven que era y su energía en concierto…era increíble! Hoy continúo escuchando la música que nos dejó y me anima a continuar explorando otros terrenos musicales.