En su nuevo disco Recados de Fora (mensajes de otros lugares), el célebre cantante angoleño Bonga cuenta la historia de un viaje fascinante a través de diferentes épocas y continentes.
El cantautor, que acaba de celebrar su 74 cumpleaños, mira hacia atrás hacia su juventud, su creciente conciencia de la colonización portuguesa. Bonga recuerda como su padre, que era pescador y acordeonista, le enseñó el placer de escuchar y hacer música, y su amor por la semba, el símbolo de la identidad nacional de Angola. La kizomba, un género preferido de las generaciones más jóvenes, es una versión modernizada de la semba.
De hecho, como uno de los últimos grandes nombres de la música africana poscolonial, Bonga encarna hoy en día a la semba.
Recados de Fora también proporciona una oportunidad para recordar algunas de las maravillosas personas que influenciaron a la carrera del cantante. Por ejemplo, la versión de Odji Maguado de B. Leza reaviva las llamas del afecto que tiene Bonga hacia las islas de Cabo Verde, un amor que comenzó en sus primeras sesiones de grabación en Rotterdam en 1972 cuando tocaba con músicos del archipiélago.
Recados de Fora también es un homenaje a su querida amiga Cesaria Evora y a Remy Kolpa-Kopoul, un periodista francés que era un gran conocedor de la música brasileña.