“Anthem for a new day” (Concord Jazz, 2014)
Sung no es una novata en el circuito jazzístico. Es un rostro conocido en Boston y Nueva York. Ha tocado con un sinnúmero de músicos de calibre. Esa envidiable lista incluye a Ron Carter, Wayne Shorter, Herbie Hancock, Regina Carter, John Faddis Terry Lyne Carringto y otras figuras de renombre.
La pianista busca su código de identidad en el mundo del piano, en el mundo del jazz. Había habitado en el universo de la música clásica en sus años universitarios. Lo que la atrajo al jazz fue una presentación del pianista y vocalista Harry Connick Jr en Houston hace unos años.
El francés Francois Zalacain, el alma de ese sello importante neoyorquino llamado Sunnyside, percibió su talento en el 2005 y extrajo de ella dos álbumes para su sello. Academia y escuela tiene. Ha quemado la escena clubística por los últimos años. “Anthem for new day” es su sexto disco.
Ahora, la pianista siente que da pasos firmes y que comienza a desarrollar una identidad jazzística más marcada. Se siente a gusto y lo manifiesta con un sexteto, una nueva casa disquera y diez temas. Cinco son de su autoría y el resto son estándares.
Sung abraza una pieza de Thelonious Monk titulada “Epistrophy” y se envuelve en ella con particularidad y confianza. Una de las composiciones de Sung es titulada “Brother Thelonious” y asi se llama una cerveza. La pieza le fue encomendada por una cervecera belga que tiene instalaciones en California.
Tener a Paquito D’Rivera en el clarinete es un lujo, tal vez es el instrumento donde el cubano posee mayor maestría. Paquito ayuda a la pianista en “Armando’s Rumba” (Chick Corea) y Samuel Torres manejan con soltura el cajón. Sin embargo, unos palmoteos secuenciados suenan fuera de lugar por momentos y por segundos echan a perder ese pulso juguetón de su piano.
En otras interpretaciones del repertorio, Helen es económica y certera. Como en “Hope Springs Eternally» donde toma insinuaciones de Dave Brubeck a su manera. Aquí Helen se aprecia suelta y segura en su digitación. Por su parte, el tema que da título a la grabación expone un aire funky y la diversidad en la sonoridad de la pianista. La violinista Regina Carter es una de sus invitadas especiales en tres piezas.
Helen, nació Houston, Texas, es de origen chino. Es una egresada del Instituto de Jazz Thelonious Monk, en Boston, luego de haber cursado licenciatura y maestría de piano en música clásica en la Universidad de Texas.
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