Calima – presentación del disco «Solo Volar»
Sala Galileo Galilei de Madrid
La sala Galileo Galilei de Madrid acogió el 19 de Marzo de 2013 con muy buen gusto la presentación del tercer trabajo del grupo barcelonés Calima denominado «Solo Volar.» Lo ha producido el bajista Juanlu «El canijo» que fue cofundador y miembro del grupo Ojos de Brujo. Tras dejar el grupo apuesta por reinventar el flamenco con otros sonidos de cualquier parte del mundo, aquí es donde nace Calima.
Poca gente se dio cita para ver el gran directo multicultural que desgranan encima del escenario. Noche de martes lluvioso, resaca de fiestas, próxima Semana Santa…. en fin que la noche no era la propicia para convocar al público que disfrutara del espectáculo de Calima. Porque, todo hay que decirlo, los que acudimos disfrutamos de lo lindo, se echó en falta más público, por supuesto, y dar ese calor que un músico necesita cuando está encima del escenario.
Tras amenizar musicalmente Dj Loop, comenzaban a ocupar sus puestos los integrantes protagonistas de la noche, con «El Canijo» al frente de la formación nos mostraron sus composiciones de su último trabajo «Solo Volar», «Suspiro», «Sabores»….con temas más antiguos «Chinorro», «Libertad», «Minué»….
En la grabación han contado con un sin fin de colaboraciones y era de esperar que algún artista invitado saltase al escenario y así fue. Enriquito de Ojos de Brujo y Josué percusionista a parte de otros miembros de la primera época del grupo, pusieron su granito de arena en la interpretación de ciertos temas que ayudaron a sonar aún mejor que en el disco.
El concierto en general fue bastante fiestero, con el mestizaje por bandera y como no… ondeando la rumba catalana en todo momento, iban combinando ritmos caribeños, mediterráneos…..con funk, reggae… al toque maestro de las sonantas de Juan Osaba y Antonio Ramírez envueltos por la base rítmica de Cristóbal Salazar a la percusión, «El Canijo» al bajo y la melódica voz de Beatriz García ponían melodías al embrujo de la bailaora Laura «La Bicha», todo un espectáculo digno de ver.
La remodelada formación puso a todo el público en pie para despedirse con el bailable «Te lo dije». Un concierto lleno de frescura, buen hacer y muchas sillas vacías que hubieran preferido soportar el peso del olvidadizo público madrileño.