“Luz de la noche – Light of the Night ” (Adventure Music, 2011)
Grábese este nombre: Florencia Ruiz. No es una novata, pero es ahora que por estos predios estadounidenses comienza a tener resonancia.
Anclada en la música pop y rock, pero con géneros diversos convergiendo desde el jazz hasta la influencia cameristica, Florencia nos ofrece un disco generoso con su guitarra, voz y sus composiciones. No solo en cantidad: 14 piezas; pero también en la busquedad de otros paradigmas.
Hay un solvencia sonora artesanal cuando se escucha el álbum en totalidad. Algo, de hecho, no muy de moda en esta época donde el sencillo, la canción aislada es la plataforma del nuevo consumo de la música. Esas catorce canciones son breves, fugaces, compactas,pero certeras y luminosas.
De pronto, uno escucha insinuaciones candombleras en “Estuve ahí”, la estética rockera se monta en “Hacia al final” con un violín circular y esos violines arropan una balada íntima como en “Que pena!”.
Dos invitados especiales ejecutan a la altura de su investidura: Jaques Morelenbaum y Hugo Fattoruso. Ambos elevan la pieza a “Todo dolor”, con piano tenue, sutil y preciso del uruguayo Fattoruso y las cuerdas del violoncello del brasileño Morelenbaum marcando el drama con sus cuerdas tensas y densas. Hay varios temas adicionales a destacar.
En resumen, un disco rico en detalles y armonias bajo la conducción y producción de Carlos Villavincencio, entre cuyos créditos estan sus trabajos junto a Fito Paez, Charlie Garcia y Luis Alberto Spinetta.